Con solo 25 años, Cooper Hefner carga con la faraónica tarea de mantener vigente una revista para hombres nacida mucho antes de la explosión de internet, con la arriesgada propuesta de mostrar a las mujeres más bellas del mundo en provocativas sesiones de fotos en las que primaba, a través de la desnudez de sus modelos, la sensualidad y el erotismo.
Fundada en Chicago en el año 1953, Playboy se financió con un préstamo de mil dólares proveniente de la madre de Hefner, y al poco tiempo se transformaría en mucho más que una revista picaresca, con celebridades de todas las procedencias disputándose las codiciadas portadas, las cuales se convertirían en un símbolo de consagración para actrices, modelos y otras personalidades del mundo del entretenimiento.
La revista de lifestyle para hombres fue una parte fundamental de la revolución sexual que atravesaron los Estados Unidos en la década del 60, reconocida también por sus emblemáticas entrevistas a directores de cine, novelistas, políticos, atletas y economistas, entre tantos otros miembros destacados de la sociedad.
La marca conocida por un conejo que viste corbata de moño continúa siendo hoy, a pesar de la decadencia de los medios impresos y el auge de otras plataformas que permiten acceder a una infinidad de contenidos pornográficos de forma gratuita, una de las más reconocidas a nivel mundial.
Cooper reconoce haber tenido una crianza bastante normal en la Mansión Playboy, y asegura que mientras sus padres estuvieron juntos —Cooper y su hermano Marston, de 27 años, son fruto del segundo matrimonio de Hefner con la modelo Kimberley Conrad— todo era muy tranquilo. El gran cambio llegó a sus ocho años, cuando sus padres se separaron y la emblemática propiedad se llenó de mujeres de «pared a pared».
El hijo menor del fundador de Playboy recuerda que cuando su padre organizaba las legendarias fiestas de Halloween y aquellas que tenían lugar en las piscinas durante el verano, había un equipo de seguridad específicamente designado a mantenerlos a él y a su hermano dentro de la casa a salvo de la «locura que sucedía fuera».
Hoy Cooper forma parte de la nueva docuserie de Amazon Playboy Americano: la historia de Hugh Hefner y, además, ha tomado el control de la compañía como director creativo desde julio de 2016, tras unirse al negocio familiar inicialmente a los 21 años, para luego abandonar su posición por diferencias con los ejecutivos al mando de la empresa.
Durante su ausencia, la revista fundada por su padre dejó de publicar fotos de mujeres desnudas, algo con lo que Cooper nunca estuvo de acuerdo y lo que provocó una caída significativa en el número de suscriptores a nivel mundial. El episodio provocó que Hefner padre abandonara el mando, al igual que otros directivos, y que Cooper volviera a incorporarse.
Una vez reincorporado, se propuso como prioridad número uno el volver a las raíces con producciones de fotos arriesgadas, incluyendo una de su prometida, la actriz de la saga Harry Potter Scarlett Byrne, quien no dudó un segundo en desnudarse para apoyar a su novio.
Cooper asegura que no fue raro ver a su futura esposa desnudarse para Playboy, dado que ha sido criado con su madre como una conejita estrella consagrada como Playmate del año en 1989, algo que ha hecho que se tome con naturalidad situaciones frente a las que otros probablemente se escandalizarían.
La versión impresa de la revista ha visto reducidas sus ediciones a solo seis por año, con el foco puesto en los contenidos online. Cooper asegura que las revistas en papel se convertirán en una elección de lifestyle, así como los son los discos de vinilo hoy entre los Millenials.
