Después de casi dos meses de “estabilidad” las dos cotizaciones se dispararon en la segunda semana del mes de abril
Poca es la diferencia que separa la cotización del dólar oficial, Dicom, de la del paralelo. Para el final de la tarde de este lunes la tasa que fija el Banco Central de Venezuela (BCV) se disparó nuevamente y cerró en los Bs. 5.200, mientras el promedio del marcador no oficial abrió la jornada de este martes en Bs. 5.356,78.
El aumento de la tasa oficial, al 10 de abril, fue de 23% cuando pasó la barrera de los Bs. 3.300 y se cotizó en 4.100 bolívares.
El mercado que se “estabilizó” durante al menos dos meses tras la intervención del BCV a finales de enero con la implementación de una política de restricción de liquidez a través del ajuste del encaje legal, reaccionó las últimas dos semanas con fuertes alzas en las cotizaciones a solo días del 1 de mayo, cuando se espera el acostumbrado incremento salarial por parte del Ejecutivo.
En su cuenta de la red social Twitter, el Ministerio para Economía y Finanzas indicó este lunes que el BCV sigue inyectando divisas al sistema bancario para “aportar a la normalización del tipo de cambio”.
En teoría, el objetivo de la política de intervención cambiaria del BCV, anunciada el 29 de enero, era lograr “la estabilidad” y “detener la hiperinflación” para fijar el “tipo de cambio en alrededor de 3.300 Bs por dólar (3.773,7 Bs por euro), cotización oficial del día 28 de enero de 2019”.
El problema, como advirtieron algunos analistas, es que para lograrlo el Ejecutivo puso en marcha “un objetivo de ancla cambiaria y la aplicación de un nuevo encaje legal de 2 niveles: un ordinario de 57% y un marginal del 100%”, lo que limitó las posibilidades de la banca de otorgar créditos.
El pasado 10 de abril, la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional (AN) informó que la inflación se ubicó en 18,1% en marzo, lo que significa un desaceleración tras el 53,7% reportado en febrero. La acumulada quedó en 429,3% y la interanual en 1.623.656%.
En rueda de prensa, el diputado Ángel Alvarado, integrante de esa instancia, explicó que el país se mantiene en hiperinflación, pero el comportamiento del indicador se vio afectado por los apagones y por la restricción de liquidez, con las medidas de encaje legal aplicadas por el BCV, que impactan el tipo de cambio.
Alvarado advirtió que una vez que el país entrara en una relativa “normalidad”, al menos en la capital donde hay menos interrupciones eléctricas, “los precios volverían a tomar su senda”. Contrapunto