Cuando aparece el “aliento de dragón” no hay chicle que lo disimule por mucho tiempo y quizá tú ya no lo notes, pero ten por seguro que los de tu alrededor sí que lo hacen. Aunque el cigarro o la falta de alimentos tras un largo periodo suelen ser una de las principales razones, existen 3 bebidas que pueden causar mal aliento sin que te des cuenta.
El mal aliento o halitosis, como también se le conoce, es un aroma desagradable que puede causarnos situaciones de vergüenza al pensar que no tenemos la suficiente higiene bucal. Sin embargo, de acuerdo con especialistas del instituto médico Mayo Clinic, puede convertirse en un problema crónico si es causado por afecciones en la boca, por ejemplo, padecer tonsilolitos en las amígdalas, una enfermedad grave de las encías como gingivitis, boca seca o reflujo.
Aunque no lo creas, todos los alimentos pueden afectar nuestro aliento si no tenemos una buena higiene bucal porque cuando comemos, los restos de comida se adhieren a los dientes y a la lengua, un festín perfecto para las bacterias que viven en nuestra boca porque éstas se alimentan de los carbohidratos, produciendo ácidos que desprenden un olor desagradable.
Un artículo publicado por The Journal of The American Dental Association, revela que alimentos como el ajo, la cebolla, pescado, atún o ciertas especias pueden contaminar nuestro aliento por horas, debido a que contienen sustancias químicas o compuestos de azufre mal olientes que entran al torrente sanguíneo, una vez ahí viajan a los pulmones para ser expulsados al exhalar.
¿Qué bebidas causan mal aliento?
No sólo es lo que comes sino también las bebidas que consumes, ya que algunas pueden causar sequedad en la boca y aunque creas que la saliva es “asquerosa”, lo cierto es que ayuda a controlar nuestra limpieza bucal al eliminar las partículas que ocasionan mal olor. ¡Tal como lo lees! Es por ello que cuando dormimos con la boca abierta solemos despertar con ese peculiar “aliento de dragón”.
Sí, por muy deliciosas que parezcan, hay bebidas que pueden aumentar la acumulación de bacterias al secar la boca, esto no quiere decir que las evites, pero sí puedes compensarlo teniendo una buena higiene bucal y aumentando tu consumo de agua, ya que ésta promueve la producción salival al mismo tiempo que actúa como un agente de limpieza constante al disolver las sustancias de los alimentos y bebidas responsables de ese tufo desagradable.
Café: aunque muchos no podemos vivir sin tomar nuestra taza de café para empezar el día, este delicioso ingrediente posee un alto contenido de azufre maloliente, por ello, consumir demasiada cafeína al día puede ocasionar sequedad en la boca, al disminuir la producción de saliva aumenta el mal olor.
Alcohol: una de las bebidas que es capaz de alterar el crecimiento de la microbioma, al beber disminuye nuestra cantidad de un tipo específico de bacteria: lactobacillus, la cual suele encontrarse en un entorno bucal saludable.
Además, el consumo de alcohol puede agravar el reflujo ácido o relajar los músculos de la parte superior del estómago, recordemos que la comida que no se ha digerido del todo puede emanar un olor desagradable que salga por la boca del estómago causando mal aliento.
Bebidas gasificadas: el ácido de los refrescos o de las bebidas burbujeantes, es un factor que causa sequedad en la boca, lo que permite la alteración del crecimiento de las bacterias y mal aliento. Imagínate si al comer tus taquitos le echas cebolla, salsa picante que suele contener ajo y además disfrutas de un refresquito… seguro aparecerá el mal aliento y ni los chicles más potentes podrán detenerlo, una vez que sus componentes viajan al torrente sanguíneo.
Aunque parezca obvio, muchas veces podemos olvidarlo, pero lo principal es tener una buena higiene bucal, cepillar tus dientes por lo menos dos veces al día, limpiar tu lengua y utilizar hilo dental después de cada comida, así como tu enjuague bucal.
Por otra parte, lo más recomendable es tomar un vaso de agua entre cada comida para eliminar las partículas de alimento que contribuyen al mal aliento. Al ser inodora, no proporciona nada de lo que las bacterias bucales puedan alimentarse.
Ahora que ya sabes qué bebidas pueden ocasionar ese “aliento de dragón” no olvides cargar con una botella de agua y un cepillo de dientes si no quieres pasar por un momento vergonzoso… antes de que alguien más te ofrezca un chicle.
Salud180
