El vicepresidente sectorial del área social, Mervin Maldonado, junto con las autoridades regionales, supervisó la atención a las familias afectadas por la crecida del río Unare, en el estado Anzoátegui.
Desde el puesto de comando instalado en Clarines, el vicepresidente informó que a la comunidad, se le “ha entregado agua potable, de alimentación (desayuno, almuerzo, cena), se han distribuido los combos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), y se tienen activadas las Casas de Alimentación para las personas afectadas”.
En materia de Salud, atienden a la comunidad, con los equipos de la Misión Barrio Adentro, Ministerio del Poder Popular para la Salud y la dirección de Salud de la entidad. “Estamos haciendo las atenciones inmediatas y preventivas. Tenemos todo el esquema de vacunación para las personas afectadas, también con la distribución de medicinas”, dijo el vicepresidente.
Las autoridades indicaron que no hay víctimas registradas. Tras la crecida del río, cuatro mil personas quedaron damnificadas y 300 viviendas con daños leves.
Por su parte, el gobernador de la entidad, Luis Marcano, indicó de que no hay precedentes en la crecida del río y que el Gobierno Nacional y regional atienden a la población, ya que en la actualidad, se registró una disminución en los niveles del caudal del río.
En el despliegue, participan equipos de Somos Venezuela, así como jefes y jefas de calle del Partido Socialista Unido de Venezuela, para la evaluación de las viviendas a reparar y las que deben ser sustituidas.
Con esta atención, las autoridades responden a las comunidades afectadas por las fuertes precipitaciones.
Con información de www.vtv.gob.ve