En una nueva manifestación pública, trabajadores activos y jubilados del sector público han reiterado su descontento por las condiciones laborales actuales, alegando una severa falta de calidad de vida. Representantes de sectores como salud, educación y empresas básicas expusieron sus preocupaciones.
José Sandoval, secretario de Asuntos Profesionales y Técnicos de SutraLumina Bolívar, expresó que las utilidades fraccionadas de este año no alcanzan para una buena cena familiar. Señaló que los beneficios laborales, que antes eran suficientes para asumir compromisos y mejorar la calidad de vida, se han deteriorado significativamente. «Los trabajadores en las empresas básicas del estado gozaban de los mejores aguinaldos, pero hoy en día la discriminación es galopante y los salarios han disminuido drásticamente», afirmó Sandoval.
El pago fraccionado de utilidades ha sido otro punto crítico. Según Sandoval, esto viola los artículos 89 y 91 de la Constitución, que establecen que los derechos laborales son progresivos e intangibles. «No hay algún artículo o ley que menoscabe estos derechos», añadió.
Trino Basanta, representante del sindicato del sector salud y de la Federación Nacional de Trabajadores de Jubilados y Pensionados de Venezuela, resaltó el desajuste entre la canasta básica, que supera los 500 dólares mensuales, y los sueldos actuales. «Es imposible tener navidades felices con los salarios míseros que recibimos», concluyó Basanta, pidiendo al gobierno cumplir con la normativa constitucional para garantizar los derechos de los trabajadores.
Yanitza Martínez