El licuado de lechosa y zanahoria, es más que un batido de frutas que aporta vitaminas y minerales al organismo, también es un remedio natural que promueve la salud digestiva y protege el corazón al regular el colesterol en la sangre.
Aunque no parezca apetitoso, incluirlo en el desayuno o acompañando cualquiera de las comidas tiene tantos beneficios para la salud, que todos querrán ingerirlo.
Beneficios del licuado de lechosa y zanahoria
Según los expertos, la lechosa, también conocida como papaya, es rica en folato, vitamina A, B y K, magnesio, cobre, calcio y potasio. Mientras que la zanahoria aporta fósforo, magnesio, yodo, calcio, vitamina A, E y K, complejo B y folatos, y una buena cantidad de antioxidantes.
Es decir, son alimentos que aportan al organismo vitaminas y minerales que benefician su correcto funcionamiento.
En conjunto, tienen la capacidad de proteger al corazón y promover una buena salud de este órgano.
Además, mejora la visión, fortalece el sistema inmunológico, previene el envejecimiento precoz y mantiene una buena salud ósea.
Información científica
Una investigación publicada en la revista científica Elsevier, encontró que las personas que participaron en el estudio y comieron un suplemento de lechosa fermentada durante 14 semanas tuvieron menos inflamación y una mejor proporción del colesterol bueno y malo.
Por su parte, la zanahoria rica en potasio mineral ayuda a relajar los vasos sanguíneos, y ello reduce el riesgo de sufrir de presión arterial alta y otros problemas cardiovasculares.
En tal sentido, el licuado de lechosa y zanahoria es altamente beneficioso para el corazón, pues su alto contenido de carotenoides reduce la inflamación y disminuye el colesterol “malo”, y aumenta el colesterol “bueno”; reduciendo así el riesgo de hipertensión arterial.
Con información 2001
