Una acostumbrada ofrenda floral al prócer guayanés Manuel Carlos Piar, dió inicio a un acto emotivo que rememoró el acto más importante logrado por las armas de Venezuela, la Batalla de San Félix.
Esta batalla, según muchos cronistas e historiadores, marcó la ruta definitiva para la independencia de Venezuela, de ahí la importancia para la población guayanesa de esta gesta.
Una vez ubicadas en sus diferentes asientos todas las autoridades civiles y militares, el ministro del Poder Popular para el Proceso Social del Trabajo, Eduardo Piñate, fue el orador de orden de la jornada histórica y resaltó el ADN rebelde y libertario del pueblo guayanés.
Piñate indicó que el mismo espíritu de lucha de aquellos hombres al mando del Gral. Piar recorre las calles de Ciudad Guayana y son las que aseguran la permanencia de la revolución bolivariana en la entidad.
«Un hecho histórico significativo, fundamental no solo para la liberación de Venezuela, sino de todo el continente, porque fue la fórmula que se replicó por las fuerzas libertarias para consolidar la independencia, romper el yugo colonial», dijo el Ministro.
En ese sentido, destacó que la meseta de Chirica, lugar donde se escenificó la Batalla de San Félix, reúne «la más pura esencia de un ADN revolucionario independentista».
Una vez culminado el discurso, el desfile cívico militar engalanó toda la tribuna principal donde se pudo observar todo el apresto operacional de los organismos de seguridad, así como la presencia de diferentes instituciones educativas, sociales y culturales.
El gobernador Ángel Marcano, el alcalde de Caroní, Tito Oviedo, la candidata a la Gobernación, Yulisbeth García y demás autoridades militares de la región estuvieron presentes en la actividad.
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