Existe un padecimiento llamado lipoinflamación que puede ser la causa de la obesidad crónica. Está demostrado que se puede luchar contra ella de forma eficaz a través de la ingesta de ciertos alimentos antiinflamatorios como la cúrcuma y el jengibre.
Además de un déficit calórico, que para cada persona debe ser diferente, así como sus circunstancias, la alimentación es el primer paso para revertir esta situación o cuadro de inflamación crónica, reseña el portal Infosalus.
Los beneficios de la cúrcuma residen en que contiene curcumina. Para activarla y garantizar su efecto, se debe mezclar con pimienta y/o aceite. En concreto, se puede usar para condimentar o para elaborar una bebida a base de almendras o de coco sin azúcar.
En el caso del jengibre, según los distintos estudios, este alimento tiene el efecto antiinflamatorio y actúa de manera positiva en algunas enfermedades, como por ejemplo las relacionadas con el sistema cardiovascular, osteoartritis. Disminuye tanto el dolor como la inflamación y la dismenorrea.
En este sentido, es recomendable ingerir alimentos con jengibre o hacer infusiones con su raíz. En este caso, se puede cortar la raíz en rodajas y guardarla en el congelador con piel. Para 500 mililitros, añade agua y deja que hierva, agrega dos o tres rodajas de jengibre pelado y deja infusionar.
Igualmente, puede hacer preparaciones tipo infusión de cúrcuma y jengibre combinadas.
Preparación
Pon a hervir el agua.
Añade un poco de jengibre y cúrcuma rallados (los gramos variarán en función de la cantidad de agua).
Deja hervir en el fuego entre 10 o 15 minutos en función de si quieres la infusión más o menos concentrada.
Retira el recipiente con la infusión del fuego y deja reposar la infusión 15 minutos aproximadamente.
Y ya está listo para consumir o bien añadir algún edulcorante para mejorar su sabor. (opcional)
Con información ATuSalud.es



