El gobierno de Rusia rechaza categóricamente un incremento de sanciones a Corea del Norte, en respuesta a Estados Unidos y su llamado a la comunidad internacional de cortar relaciones con Pyongyang, tras sus ensayos armamentísticos.
«Nuestra actitud frente a esto (el llamamiento de EEUU) es negativa. En más de una ocasión hemos recalcado que la presión mediante sanciones es una vía prácticamente agotada», dijo el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en Minsk, citado por medios rusos.
Recordó que las resoluciones de la ONU con sanciones a Corea del Norte, incluye también un proceso negociador, una exigencia que según Rusia «hace caso omiso la parte estadounidense».
«Considero que es un gran error», señaló el canciller ruso, alegando que las últimas acciones de Estados Unidos «parecen apuntar conscientemente a provocar a Pyongyang para que dé pasos bruscos».
«Da la impresión de que se hace todo para que Kim Jong-un (el líder norcoreano) pierda los papeles y se lance a una nueva aventura», insistió el jefe de la diplomacia rusa.
Lavrov subrayó que Estados Unidos debe explicar cuál es su objetivo en la crisis coreana.